En el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, desde el Ayuntamiento de Yecla, volvemos a alzar una sola voz frente a las violencias que se ejercen contra las mujeres y las niñas por el simple hecho de serlo, manifestando, una vez más, nuestro más firme rechazo y condena a la violencia de género.
Según el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, la violencia de género supone la manifestación más extrema de desigualdad y discriminación de las mujeres.
El número de víctimas mortales en España en lo que va de año asciende a 52, reseña sin duda preocupante, que testimonia una violación reiterada de los derechos humanos, que pone a la mujer, por el mero hecho de serlo, en una situación de clara vulnerabilidad.
Se hace necesario subrayar que la violencia de género es un problema público y estructural, de tal manera que su erradicación y la protección a las víctimas, es una obligación que incumbe a toda la sociedad.
Desde esta perspectiva, es preciso, por tanto, señalar que el compromiso de los hombres en la prevención y eliminación de la misma se vislumbra como fundamental, siendo indispensable que hombres y mujeres trabajen en la misma dirección, evitando el enfrentamiento y buscando la erradicación de esta lacra.
El problema de gran complejidad evidencia que sigue siendo necesario reivindicar la igualdad real entre hombres y mujeres, obligándonos a prestar especial atención a indicadores que puedan manifestar desigualdades para que no pasen desapercibidas y poder hacerles frente.
En este es nuestro deber continuar sensibilizando y concienciando a la población en general a fin de lograr la erradicación de la misma, como único camino para lograr una sociedad más justa e igualitaria.
Así como implementar medidas efectivas de protección, sin colectivismos, educar en valores desde la infancia a través de la cultura de la resolución pacífica de los conflictos, la eliminación de los prejuicios y estereotipos de género, como camino para la construcción de una sociedad libre de violencia contra la mujer.
La violencia contra las mujeres continúa siendo uno de los desafíos más urgentes de la sociedad y su erradicación debe ser uno de nuestros grandes retos. Pues preocupan los incesantes asesinatos, el incremento de las diferentes formas de violencia contra la mujer, así como el efecto devastador de los conflictos armados que afectan a mujeres y niñas.
Como igual de preocupante es el hecho de que agresores, violadores y pederastas no cumplan las penas que merecen y hayan obtenido mejoras penitenciarias, por ello es necesario igualmente trabajar entre todos para mejorar las leyes.
Aumentar la protección, seguimiento, apoyo y ayuda integral para todas las víctimas, a través, entre otros, del aumento de efectivos de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, aumentar los recursos judiciales y personales a fin de agilizar los procedimientos judiciales y la resolución de los mismos.
La igualdad real nos lleva hacia un horizonte que contemple la concesión por fin de “idénticos derechos”. Para alcanzarlo, cabe exigir mucha sensibilización social en materia de igualdad, así como políticas que garanticen el cumplimiento efectivo de estos derechos.
Hoy, 25 de noviembre y todos los días del año estamos de parte de esas víctimas y trabajamos para eliminar de una vez por todas la violencia contra la mujer.