La alcaldesa de Yecla, M.ª Remedios Lajara, ha realizado la lectura pública del manifiesto con motivo del Día Internacional para la eliminación de la violencia hacia la mujer. El acto ha contado con una intérprete de lengua de signos de ADFY y con la actuación de los músicos: Francisco José Díaz Martínez y Álvaro Puche, quienes ha interpretado “Dúo para dos violines número 5 y Opus 5” de Magdalena Laura Sirmen, Andantino y Allegreto.
Manifiesto:
Hoy, 25 de noviembre, el Ayuntamiento de Yecla se manifiesta con firmeza y determinación para condenar una de las más graves vulneraciones de los derechos humanos y declarar que la violencia contra las mujeres no tiene cabida en nuestra sociedad.
Esta fecha nos recuerda que la erradicación de cualquier forma de violencia hacia la mujer es un esfuerzo conjunto, urgente y prioritario, que exige más que palabras. Necesita hechos, compromiso y recursos para garantizar la seguridad y la dignidad de todas las mujeres.
En los últimos meses hemos vivido situaciones en nuestro país que han generado una profunda alarma social y han puesto en entredicho la confianza de las víctimas en el sistema. Estos hechos nos obligan a actuar con determinación: no podemos permitir que ninguna mujer se sienta desprotegida.
Por eso hoy reafirmamos nuestro compromiso absoluto con la protección de las víctimas. Cada dato esconde una realidad: una persona que merece seguridad y respeto. No son cifras, son vida: mujeres que merecen vivir con libertad y dignidad.
Por ello, es tarea de todos trabajar para restaurar la confianza de las víctimas en el sistema que debe protegerlas, garantizando así la efectividad de los distintos recursos, medidas y actuaciones implementadas.
La seguridad de las mujeres es una prioridad innegociable. Una defensa adecuada y eficaz de las víctimas no puede llevarse a cabo sin la garantía de medios integrales y suficientes: acompañamiento físico y psicológico, asesoramiento jurídico, apoyo social y recursos habitacionales.
La violencia de género no sólo se combate con medidas urgentes. No hay excusas, no hay retrocesos: Yecla seguirá trabajando cada día para construir una sociedad libre de violencia, donde la igualdad y el respeto sean la base de nuestra convivencia.
Los Ayuntamientos son la primera puerta de entrada ante situaciones de necesidad o urgencia, desempeñan un papel fundamental en la protección y acompañamiento de las víctimas. Por su cercanía y conocimiento del territorio son un pilar imprescindible en la lucha contra la violencia hacia la mujer.
Desde las administraciones locales solicitamos una protección real y efectiva de las víctimas. Las administraciones superiores precisan garantizar que cada herramienta funcione, que cada recurso esté disponible y que cada mujer encuentre respuestas inmediatas y seguras.
Por ellas y para ellas, Yecla seguirá exigiendo, reforzando y mejorando los recursos y la atención. Mientras exista una sola mujer víctima de violencia, no cesaremos en nuestro compromiso de protección y justicia.
Obra interpretada
Los músicos: Francisco José Díaz Martínez y Álvaro Puche, han sido los encargados de interpretar dos piezas musicales durante el acto. Se trata de “Dúo para dos violines número 5 y Opus 5” de Magdalena Laura Sirmen, Andantino y Allegreto.
La autora de la obra, Maddalena Laura Sirmen fue una destacada violinista y compositora veneciana, discípula de Giuseppe Tartini. Su carrera como intérprete y creadora musical rompió barreras en una época en la que pocas mujeres alcanzaban reconocimiento en el ámbito instrumental. Los Sei Duetti per due violini, publicados como Opus 5 por la editorial Venier en París hacia 1775, reflejan su dominio técnico y sensibilidad compositiva dentro del estilo clásico temprano.
La otra pieza interpretada, Dúo número 5 se inscribe en esta colección como una obra de cámara íntima, concebida para dos violines sin acompañamiento. Aunque en la portada original se denominan “Sonatas”, el término “Duetto” en la partitura subraya el carácter dialógico y equitativo entre las voces. Este dúo, como el resto del Opus 5, puede considerarse una joya del repertorio camerístico para violín, ideal para mostrar la interacción musical entre dos intérpretes con sensibilidad historicista. Su interpretación permite redescubrir el legado de una compositora que supo conjugar técnica, estilo y emoción en una época de transición musical.
